Policías involucrados en delitos como reclutamiento de menores y tráfico de armas durante 2024

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Policías destituidos, casos de corrupción y crimen organizado marcaron 2024.
El 2024 fue un año crítico para la Policía Nacional, donde más de una docena de agentes en servicio activo fueron vinculados a delitos graves, como corrupción y crimen organizado. Cerca de 50 policías fueron destituidos por faltas administrativas y disciplinarias.
Entre los casos más alarmantes se registraron agentes que reclutaban menores para entrenarlos como sicarios, policías dedicados a la extorsión, y servidores vinculados al tráfico de armas y drogas. Según Víctor Zárate, comandante de la Policía Nacional, de enero a octubre de 2024, 425 uniformados fueron desvinculados a nivel nacional como parte de un proceso de depuración interna.
Factores detrás de los actos de corrupción.
Luis Lara, exjefe del departamento de Asuntos Internos de la Dirección de la Inspectoría Nacional de Policía, señaló que estos problemas no son nuevos. «Siempre han existido elementos buenos y malos en las instituciones de seguridad. Algunos se dejan cooptar por organizaciones criminales debido a intereses económicos, viendo en estas actividades una forma rápida de generar ingresos», comentó.
Aunque también existen casos donde las amenazas a las familias de los agentes influyen en estas decisiones, Lara enfatizó que estas situaciones son excepcionales. Sin embargo, un tema preocupante es que, en ciertos casos, los agentes destituidos logran reincorporarse mediante recursos judiciales.
Operativos y escándalos en Manabí.
En febrero, en el sector de La Papaya, cantón Rocafuerte, un operativo del Bloque de Seguridad permitió capturar a dos policías en servicio activo junto con cinco personas más. Transportaban armas, municiones, drogas y uniformes policiales falsificados. En otro operativo, en mayo, 10 policías y agentes de tránsito fueron arrestados por presunta asociación ilícita. Según la Fiscalía, estos utilizaban sus funciones para extorsionar a ciudadanos al liberar vehículos retenidos a cambio de sobornos.
Un caso especialmente grave ocurrió en diciembre en Jipijapa, donde un cabo primero fue detenido por reclutar menores en situación de vulnerabilidad para entrenarlos como sicarios. Este agente está siendo procesado por trata de personas y presunta pertenencia a un grupo delictivo que opera en la provincia.
Acciones disciplinarias y administrativas.
En Manabí y Santo Domingo de los Tsáchilas, 2024 cerró con 172 procesos investigativos por faltas administrativas graves y muy graves. De estos, 104 culminaron en sumarios disciplinarios, 44 policías fueron destituidos, y otros enfrentaron sanciones económicas. Al menos 18 casos siguen pendientes de resolución en 2025.
El Código Orgánico de Entidades de Seguridad Ciudadana y Orden Público (Coescop) establece que las faltas graves y muy graves, o la reincidencia en un periodo de 365 días, pueden ser causales para la destitución. Asimismo, el Plan de Transformación Institucional sigue vigente como parte de los esfuerzos por combatir la corrupción dentro de la institución.
A pesar de estos esfuerzos, la Policía Nacional enfrenta el reto de recuperar la confianza de la ciudadanía, demostrando su compromiso por depurar a los malos elementos que empañan el trabajo de quienes honran su uniforme.
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