febrero 6, 2025
Número de Vistas: 28

Más de 28.000 estudiantes sufrieron abuso sexual en Ecuador en la última década.

Abuso sexual en el entorno educativo

Entre 2014 y 2024, un total de 28.082 estudiantes fueron víctimas de violencia sexual en Ecuador, según datos del Ministerio de Educación. De acuerdo con el ‘Plan Nacional para la Erradicación de la Violencia en el Contexto Educativo’, el 90% de los casos afectó a niñas, y la mitad de ellas tenía entre ocho y 14 años.

El informe, que analiza el impacto de la violencia en el ámbito escolar, también detalla que el 74% de los agresores no pertenece al sistema educativo, lo que indica que los principales victimarios provienen del entorno cercano de los estudiantes. Sin embargo, el 26% de los casos involucra directamente a miembros de la comunidad educativa, entre ellos profesores, estudiantes y, en menor proporción, personal administrativo.

Otras formas de violencia en el sistema educativo.

Abuso sexual de niños - Humanium

El abuso sexual es uno de los tipos de violencia más graves dentro de las instituciones educativas, pero no es el único. Entre 2022 y 2024, se registraron 5.941 casos de violencia física, 4.567 de violencia psicológica y 1.195 de abuso sexual en escuelas y colegios. Según el Ministerio de Educación, el 93% de las víctimas ha recibido acompañamiento para enfrentar las secuelas de estos hechos.

Lorena, madre de una niña de 12 años que sufrió abuso en su escuela en Quito, relata que los agresores fueron sus propios compañeros de clase. “¿Cómo es posible que haya niños que hagan estas cosas terribles a sus propios amigos?”, cuestiona con indignación. Además, critica la falta de apoyo continuo por parte del plantel educativo. “Al inicio nos ayudaron, pero luego se olvidaron. Tuve que cambiarla de escuela”, cuenta.

El Ministerio asegura que existe un protocolo para atender estos casos, brindar apoyo a las víctimas y orientar a sus familias.

Impacto y desafíos.

Las consecuencias del abuso en el ámbito educativo pueden ser devastadoras. Las víctimas suelen experimentar bajo rendimiento académico, ansiedad, depresión, trauma, autolesiones e incluso riesgo de suicidio.

El Plan Nacional destaca que la violencia en las aulas genera un ambiente desalentador que limita la motivación y participación de los estudiantes, perpetuando desigualdades educativas. Además, identifica desafíos en la prevención, como la falta de personal especializado, recursos económicos insuficientes y desconocimiento de las estrategias de intervención.

Otro factor preocupante es la limitada comprensión de las leyes por parte de algunas autoridades educativas, lo que dificulta una respuesta efectiva ante los casos de violencia y aumenta el riesgo de que más estudiantes sean afectados.

Estrategias para erradicar la violencia en las aulas.

El Plan establece cinco ejes fundamentales para enfrentar la violencia en el contexto educativo:

  • Prevención
  • Detección
  • Abordaje y reparación
  • Coordinación entre instituciones
  • Investigación

Uno de los objetivos planteados es que, para 2023, el 95% de las instituciones educativas apliquen al menos una metodología de prevención de violencia. Asimismo, se busca que el 70% de las familias y docentes reciban formación para identificar signos de abuso y actuar de manera oportuna.

Este panorama revela la urgencia de fortalecer las estrategias de prevención y atención para garantizar que las escuelas sean espacios seguros para todos los estudiantes.

Exprésate Morona Santiago

Primer Medio de Comunicación Digital de la Provincia

Macas – Ecuador

Inmobiliaria Nativa