Redes sociales agravan los trastornos alimenticios
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Las redes sociales agravan los trastornos alimenticios, según un estudio.
Una investigación realizada por un equipo de la Universidad de Málaga, en España, revela que las redes sociales intensifican los trastornos de conducta alimentaria (TCA), como la anorexia y la bulimia. La interacción en estas plataformas fomenta comunidades que refuerzan comportamientos dañinos y promueven una mayor insatisfacción corporal, especialmente entre mujeres jóvenes.
El estudio, titulado Uso problemático de Internet y su relación con los desórdenes alimenticios, advierte que redes como TikTok, Instagram y Twitter asocian el sobrepeso con términos negativos como enfermedad, fracaso o ruina, y muchas veces ridiculizan o insultan a quienes no encajan en un ideal de delgadez extrema.
Andrés Fontalba, uno de los investigadores, señala que en la práctica clínica se observa un incremento de casos de ansiedad, depresión y trastornos alimenticios, en parte debido al impacto de las redes sociales. «Esa información que antes era difícil de obtener, ahora está al alcance de su móvil», afirma.
El estudio también destaca que muchas personas con TCA encuentran en internet comunidades afines, donde participan en retos y buscan apoyo para mantener conductas dañinas. A través de estas plataformas, comparten dietas extremas, métodos para perder peso de manera acelerada y fotografías de su evolución, validando su delgadez. En algunos casos, incluso intercambian estrategias para ocultar su trastorno a familiares y profesionales de la salud.
Los investigadores identificaron que estos grupos suelen operar con una estructura jerárquica, donde una persona establece normas estrictas que los demás siguen de manera autoritaria. Además, se detectó que la pandemia de COVID-19 intensificó el uso de redes sociales, lo que aumentó la insatisfacción corporal y el temor a la exclusión social, agravando así los trastornos alimenticios en adolescentes y jóvenes adultos.
Para el análisis, los especialistas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Málaga—Claudia Ruiz, Raquel Cueto, José Miguel Pena y Andrés Fontalba—llevaron a cabo un estudio cualitativo en el que examinaron 57 recursos de seis plataformas digitales: TikTok, Instagram, Google Blogs, Telegram, Facebook y Twitter.
El material analizado incluyó videos, imágenes, publicaciones en blogs, mensajes de chat, archivos en formato PDF y descripciones de grupos, todos con contenido relacionado con la promoción de la anorexia y la bulimia en inglés y español.
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